Vivimos en la época de las comunicaciones y los clientes demandan información. Los consumidores realizan muchas consultas antes de efectuar sus compras. Navegan por la red buscando testimonios, reseñas o comentarios que les puedan guiar a la hora de decidir por un producto o por otro. Esta necesidad de información ha sido identificada por los empresarios y han querido dar respuestas ¿Qué mejor que uno mismo para tratar los temas que interesan a su público objetivo?
El marketing de contenidos se basa en la elaboración de información valiosa para los clientes potenciales de una empresa, ya que el contenido ofrecido debe ser realmente útil y aportar valor al lector. De este modo, las dudas de los usuarios serán resueltas y la empresa consigue dejar patente sus conocimientos proyectando una imagen profesional y experta en el sector.
Poniendo a su disposición contenidos, datos e información relevante se consigue fidelizar al usuario. Cada vez que quieran resolver unas dudas relacionadas con la naturaleza del negocio van a acudir al blog de la compañía para encontrar respuestas. En el momento en que tengan que realizar una compra, acudirán a esa empresa por la sensación de seguridad que les ha transmitido a través del blog.
La creación de contenidos de valor para la audiencia es una manera muy efectiva de llegar a la gente y de poder instalarse en su mente como profesional de un determinado sector. Partiendo de la premisa de que los artículos son potentes, el otro aspecto relevante en una estrategia de marketing de contenidos tiene que ver con la difusión de estos. No vale de nada tener el mejor contenido si no llega a nadie.
Para conseguir la correcta difusión de los contenidos se debe comenzar por una estudiada configuración del calendario editorial. Muchas veces no se le presta atención a esto, pero el componente estacional tiene una influencia importante. Lo veremos más claro con un ejemplo: si tenemos una empresa de chocolates, los artículos sobre los mejores chocolates para el Dia de los Enamorados tendrían que estar programados para finales de enero.
Además del componente estacional, también influye la variedad de temas programados en el calendario editorial. Las temáticas a tratar, a pesar de tener que guardar relación con la actividad económica, deben resultar frescas y diferentes. Si una empresa realiza durante 3 semanas seguidas publicaciones en la misma línea tipo no va a conseguir mantener el interés de la audiencia. Al leer uno, parece que están leídos todos.
Teniendo en cuenta estos dos aspectos, los contenidos van a ser más apetitosos, solo queda buscar el modo de difundirlos:
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